El reconocido actor venezolano Édgar Ramírez, es uno de los famosos latinos que está conquistando Hollywood y según el New York Times, es uno de los actores que debería ser nominado al Óscar. El tachirense, se ha codeado con grandes del cine, tales como Robert De Niro con quién ya ha trabajado en varias oportunidades, en “JOY” del director David O. Russell y recientemente en “Hand Of Stones” del director venezolano Jonathan Jakubowicz, donde da vida al boxeador panameño Roberto “Manos de Piedra” Durán y pare usted de contar los proyectos cinematográficos donde este talentoso artista ha participado.
Recientemente, el nuevo “Bodhi” de Point Break, ha publicado un “Throwback Thursday” de
cuando para él ser un artista de Hollywood, solo era un sueño por
alcanzar. El Cacique de las telenovelas, aprovechó la etiqueta para
recordar sus deseos y ambiciones de hace casi 20 años, cuando era solo
apenas un estudiante de periodismo en el año 1999. Ramírez, comentó :
“Ya han pasado 20 años y recuerdo nítidamente las conversaciones en el cafetín, mis amigos y yo soñábamos con terminar la carrera,irnos a especializar afuera y regresar a Venezuela a aplicar los conocimientos.Nunca nadie hablaba de quedarse en el extranjero….”
Según en algunos artículos de la web,
Venezuela es uno de los países con mayor porcentaje de “fuga de
talentos”, debido a las condiciones de vida que en la actualidad se
percibe en el país, esto explicaría un poco más de detalles lo que el
nominado a un Globo de Oro, quiso referirse.“La inseguridad, los
problemas económicos como inflación y desempleo y el hecho de no
visualizar un futuro promisorio son algunas de las principales razones
que han hecho a los criollos buscar mejores oportunidades de vida en
otros países” (fugadetalentos.blogspot.com).
No es la primera vez que Ramírez se refiere a las situación que vive actualmente su país natal. Durante la celebración del 5ta edición del Festival Internacional de Cine de Panamá. El destacado actor, se manifestó ante las malas circunstancias de
su país y aseguró que una característica común en países de América
Latina es que los ciudadanos esperan siempre a que llegue una persona y
se convierta en su “salvador”.
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