Como toda una reina que luce de punta en blanco, más aplomada y serena luego de ser coronada como la nueva miss Venezuela Mundo 2014, llegó Débora Menicucci a su cita con PANORAMA. La hermosa chica de 23 años es italo venezolana y representará a nuestro país en el concurso Miss World a celebrarse el 14 de diciembre en Londres.
En la pasada edición del Miss Venezuela se perfilaba como la gran favorita, pero debió conformarse con los aplausos y no le quedó otra que empacar su maleta y continuar sus estudios de diseño de modas en Italia. “En aquel entonces me sentí deprimida y triste porque trabajé mucho para el concurso”.
“Luego de un año estoy feliz y siento que se hizo justicia y todo en la vida se puede lograr más tarde o más temprano. Estoy en mejores condiciones, más delgada y segura de mí, aunque reconozco debo trabajar un poco más en la oratoria. Mis compañeras todas me felicitaron y en los concursos de belleza se gana y se pierde y yo soy un ejemplo”.
Debora no titubeó al preguntarle por una fotografía que circula en las redes sociales donde se hace la comparación del antes y posterior a su tranformación como miss. “La dos fotos soy yo, pero en la primera tenía 15 años y ni pensaba ser reina de belleza. No me da pena aceptar que me operé la nariz y los senos, y por supuesto que me seco el cabello. En realidad no le doy importancia a las críticas y ya tengo una coraza”.
Sobre su favoritismo, dijo: “La corona del Miss Venezuela se gana y no se compra. Yo tampoco soy rica de cuna y me enorgullece decir que salí del barrio La Pastora, en Caracas. Lucharé por ganar otro título mundial para mi país y lanzar una colección de ropa infantil”.
En la pasada edición del Miss Venezuela se perfilaba como la gran favorita, pero debió conformarse con los aplausos y no le quedó otra que empacar su maleta y continuar sus estudios de diseño de modas en Italia. “En aquel entonces me sentí deprimida y triste porque trabajé mucho para el concurso”.
“Luego de un año estoy feliz y siento que se hizo justicia y todo en la vida se puede lograr más tarde o más temprano. Estoy en mejores condiciones, más delgada y segura de mí, aunque reconozco debo trabajar un poco más en la oratoria. Mis compañeras todas me felicitaron y en los concursos de belleza se gana y se pierde y yo soy un ejemplo”.
Debora no titubeó al preguntarle por una fotografía que circula en las redes sociales donde se hace la comparación del antes y posterior a su tranformación como miss. “La dos fotos soy yo, pero en la primera tenía 15 años y ni pensaba ser reina de belleza. No me da pena aceptar que me operé la nariz y los senos, y por supuesto que me seco el cabello. En realidad no le doy importancia a las críticas y ya tengo una coraza”.
Sobre su favoritismo, dijo: “La corona del Miss Venezuela se gana y no se compra. Yo tampoco soy rica de cuna y me enorgullece decir que salí del barrio La Pastora, en Caracas. Lucharé por ganar otro título mundial para mi país y lanzar una colección de ropa infantil”.
