Marcos Witt y Myrka Dellanos subieron al escenario del Festival People en Español en el Henry B. González Convention Center de San Antonio, Texas, para ofrecer una charla sobre la espiritualidad más allá de la religión.
El cantante de música cristiana enfatizó que "el perdón es esencial para poder vivir vidas alegres. La falta de perdón es una carga terrible cuando es algo que podríamos soltar y vivir más felices. Al no perdonar, esa persona nos está controlando a nosotros.
"Los médicos han descubierto que la falta de perdón puede crear en nosotros la amargura. Crea cáncer y afecta las células de nuestro cuerpo, por eso tenemos que aprender a perdonar. Mucha gente vive enferma por esa falta de perdón. Vivir con amargura, con temor, con angustia... hay que aprender a soltar esas cosas".
La periodista cubanoamericana comentó que cuando se habla de temas relacionados con Dios, "la gente piensa que uno tiene un dedo acusador". A lo que Witt aclaró que "Dios nos ama tanto; no está señalando a nadie. Desafortunadamente, muchos hombres señalan a la persona, de eso no se trata".
El cantautor también habló de la importancia de perdonar y pedir perdón. "Todos los días hay oportunidades para pedir perdón. Si nunca han cometido un error, pidan por nosotros", dijo Witt.
Por su parte, Myrka aseveró que cuando se habla de estos temas, la gente pregunta si "uno se metió a la religión", pero aclaró: "Esto no tiene nada que ver con religión. Se trata del amor, del cariño, del poder de vivir una vida en paz dentro de las tribulaciones de la vida".
Por otra parte, Witt hizo hincapié en la importancia de poner el ejemplo con nuestras acciones. "Si quiere que su familiar sea una buena persona, sea una buena persona con su familiar", dijo Witt, al momento que recomendó leer los Evangelios de la Biblia, al igual que los Salmos, que son libros "muy poéticos que ayudan a la devoción y a conectar (con Dios)".
Para completar la charla, Marcos interpretó algunos de sus temas emblemáticos al piano, como "Tu fidelidad", "Renuévame" y "Me has tomado en tus brazos". El público se unió cantando a coro y levantando sus manos en señal de alabanza.
Pero antes de empezar a cantar, Witt preguntó a la audiencia: "Si Paquita la del Barrio le canta a su 'Rata de dos patas', ¿por qué yo no le puedo cantar a Dios", causando así un aplauso por parte de los presentes.
"La música es algo precioso. Me gustan mis Grammys, pero no me impresionan. Me impacta y me alimenta muchísimo cuando veo que la gente se acerca a Dios [a través de mi música]", dijo Witt.
