La llegada de un bebé real siempre crea expectación. Pero tratándose del primer hijo de Kate Middleton y Guillermo de Inglaterra (y, por tanto, futuro heredero de la corona británica) el interés por el nacimiento se duplica. Las apuestas sobre el día, la hora, el sexo e incluso el nombre no se han hecho esperar, llegando a crear verdaderos debates en Twitter –red social que ha cobrado una vital importancia durante los últimos días del embarazo– convirtiéndose en trending topic con el hasgtag #royalbaby, no sólo por la condición real del nacimiento sino también por la larga espera que ha mantenido a la prensa (y al mundo) en vilo. La mismísima actriz Olivia Wilde se extrañaba de seguir haciendo entrevistas por teléfono mientras Kate estaba de parto: "¿no deberían (los periodistas) estar cubriéndolo?", se preguntaba desde su cuenta de esta red social.
Durante las últimas semanas mucho se ha especulado sobre el nacimiento. Y más desde que la Condesa de Cambridge (convertida en referente de estilo para muchas futuras mamás durante todo su embarazo) protagonizara su último acto oficial antes de dar a luz. Era el pasado 15 de junio durante el Trooping the Colour (saludo a la bandera) y lo hacía con un abrigo rosa bebé firmado por Sarah Burton para Alexander McQueen, diseñadora en la que confió el día de su boda y en la que ha confiado en varias ocasiones durante su dulce espera.
Muchos apostaban que sería un niño, pese al ahínco con el que la Casa Real ha afirmado que "no saben el sexo de su bebé, y no quieren saberlo". Algunos hasta se atrevían a dar nombres: Alexandra, Charlotte o Diana si era niña; George, Charles y Philip si era niño. Hoy, 22 de julio, las incógnitas se han despejado, ya que el nuevo miembro de la casa real británica –tercero en la línea de sucesión al trono– ha sido un niño nacido hoy a las 4.24pm tras unas 14 horas de parto que -según apuntan las fuentes- ha sido natural. El pequeño de los Duques de Cambridge ha pesado algo más de 3 kilos y medio y se encuentra en perfectas condiciones.
El parto ha tenido lugar en el ala Lindo Wing del prestigioso hospital St. Mary en Paddington (Londres) –donde ya hubo otros famosos nacimientos, como el de Peter y Zara Philips– y estuvo asistido por el ginecólogo Marcus Setchell, el mismo que atendió a la Condesa de Wessex en sus dos partos. El Palacio de Buckingham acaba de confirmar la feliz noticia y han confirmado que "su real alteza y su hijo se encuentran perfectamente". La Reina Isabel, el Primer Ministro David Cameron y los padres de Kate y Guillermo han sido los primeros en conocer la noticia; y ya comienzan a producirse las primeras declaraciones al respecto, incluida la del príncipe Guillermo: "no podría estar más feliz", ha declarado el Duque de Cambrigde de forma oficial. El propio príncipe Carlos -padre de Guillermo- ha manifestado sentirse "enormemente orgulloso y feliz por ser abuelo por primera vez" . Por su parte, el Primer Ministro David Cameron, decía en su cuenta de Twitter: "Estoy feliz por el duque y la duquesa ahora que su hijo ha nacido. Todo el país lo celebrará. Serán unos padres maravillosos".
A todo este aluvión de buenas noticias se une la revelación del nombre del recién nacido, que finalmente se llamará: George Alexander Louis. Su título oficial será Prince George of Cambridge, según se ha hecho saber a los medios de comunicación a través de un comunicado de prensa procedente de palacio. ¡Felicidades!
