La lista de los ilustres invitados al matrimonio del príncipe Alberto II de Mónaco y de Charlene Wittstock el fin de semana próximo, refleja el lugar de los Grimadi entre las familias reales europeas, así como la afición de la pareja por el deporte, la moda y el medioambiente. Dos meses después de la boda de Guillermo y Catalina en Londres, ahora duques de Cambridge, la celebración nupcial de Mónaco - que no un enlace real, sino principesco- tendrá menos fasto y pompa y contará con menos cabezas coronadas y menos líderes mundiales.
Oficialmente, han sido invitados al enlace "los jefes de Estado de los países en los que su Alteza Serenísima el príncipe Alberto II ha viajado en visita oficial desde su ascensión al trono, en 2005, así como los jefes de Estado de los países vinculados a su familia (Estados Unidos, Irlanda y Sudáfrica".
Pero, aunque en la lista oficial de los que estarán presentes en el enlace figura el mandatario estadounidense, Barack Obama, y el jefe de Estado surafricano, Jacob Zuma, ninguno de los dos viajará a Monaco.
La presidenta de la República de Irlanda, Mary McAleese, asistirá al enlace, donde se codeará con otros líderes europeos que han anunciado su presencia, entre ellos el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, el de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, y el de la República federal de Alemania, Christian Wulff.
La lista de representantes de las familias reales que estarán presentes en la boda incluye a los soberanos de Bélgica y Suecia y a los príncipes herederos de Dinamarca y Holanda.
Vendrán también el conde y la condesa de Wessex, que representarán a Inglaterra, así como la familia real de Savoya y el emir de Qatar.
En cambio, los Príncipes de Asturias, que estaban incluidos en la lista de invitados, no asistirán finalmente a la boda de de Mónaco. La razón dada por la Casa del Rey es que la invitación fue cursada al rey Juan Carlos, quien fue operado recientemente de la rodilla y aún no se ha recuperado.
El mundo de los negocios estará representado por Bernard Arnault, proprietario del grupo de lujo LVMH.
La presencia del aereonauta suizo Bertrand Piccard recordará que una de las prioridades del príncipe Alberto, que es padrino de la aviación con impulsión solar, es el medioambiente, y las expediciones científicas.
La pareja es también gran aficionada al deporte, y el principado es sede de competencias célebres, como el Gran Premio de Fórmula 1 y el Masters 1000 de tennis.
Están invitados por eso a la boda el presidente del Comité Olímpico Internacional (CIO), del cual Alberto II es miembro, Jacques Rogge, y el presidente de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), Jean Todt.
Del mundo de la moda, estarán presentes el modista Karl Lagerfeld, director artístico de Chanel, así como la ex modelo británica Naomi Campbell y la diseñadora francesa Inès de la Fressange.
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