Las candidatas latinoamericanas afrontan con “optimismo” y “cargadas de energía” el certamen de Miss Mundo que se celebra en Londres, según dijeron hoy a Efe algunas de las participantes en la jornada de presentación del concurso internacional de belleza.
En un lujoso hotel a orillas del río Támesis, con el muy característico Big Ben de fondo, atendieron a la prensa las 124 candidatas, que sueñan con suceder a la filipina Megan Young como Miss Mundo, en un certamen marcado por el asesinato hace pocos días de Miss Honduras 2014, María José Alvarado.
Pese al ambiente distendido y optimista en el que viven las contendientes en Londres durante los días previos a la gala final del certamen, que se celebrará el próximo 14 de diciembre, la ausencia de una de las participantes ha “marcado” a las candidatas, especialmente a las de Centroamérica y Sudamérica.
El grupo de participantes se reunió el pasado domingo en el centro de conferencias Gibson Hall, en Londres, en un servicio religioso especial en el que se recordó a Alvarado y a su hermana, desaparecidas el 13 de noviembre y que fueron encontradas muertas seis días después en un departamento de Santa Bárbara.
“Su fallecimiento es algo que nos ha dolido a todas. Era una adolescente que quería cumplir su sueño. Nosotras estamos disfrutando esta experiencia y ella no pudo, y es algo que nos duele mucho y que no es justo para Miss Honduras”, dijo, entre lágrimas, la colombiana Leandra García.
“Para mí fue algo muy doloroso. La conocí tres meses antes de venir a Londres, en una actividad que tuvimos juntas en Belize. Miraba las noticias y no lo podía creer”, dijo por su parte Keyla Bermúdez, representante de Guatemala, de 22 años.
“Aunque no llegó a Londres, todas la sentimos aquí. Era parte de la concentración y la vamos a llevar en el corazón”, indicó la representante española, Lourdes Rodríguez, de 20 años.
Como una forma de recuperar el ánimo, las participantes acudieron ayer a ver el célebre musical “El fantasma de la ópera” y hoy subrayaron sus “ganas de disfrutar” durante las tres semanas previas a la final, que tendrá lugar en el Centro de Exposiciones Excel de la capital británica.
La caleña García, de 22 años, llegó a Londres dispuesta a ser la primera participante colombiana en llevarse al país “cafetero” el título de Miss Mundo.
“Representar a Colombia en este certamen es un orgullo. Lo importante es dejar el nombre de tu país lo más alto posible. Pero solo el hecho de estar aquí es ya una recompensa”, comentó la joven, que trabaja como presentadora de televisión.
A la venezolana Débora Menicucci, por su parte, la acompaña la presión propia de este tipo de certámenes. En Venezuela, de hecho, se celebran infinidad de concursos de belleza y miles de niñas sueñan con llegar a ser un día reinas sobre la pasarela.
En Londres, esta modelo y diseñadora, de 1,80 metros de estatura, podría convertirse en la séptima mujer en llevar al país sudamericano el ansiado título, desde el nacimiento de Miss Mundo en 1951.
“Estar aquí lo es todo para mí -dijo Menicucci, de 23 años-. Quiero que el nombre de Venezuela llegue a lo más alto. Me gustaría disponer de ese poder que te da la corona y demostrar que mi país quiere hacer algo por la gente que sufre. He venido a Londres por la victoria”, afirmó.
Por su parte, Daniela Álvarez, mexicana de 20 años que aspira a ser presentadora de televisión, aseguró que ha ido a la capital británica a “mostrar al mundo de lo que es capaz la mujer mexicana”.
“No soy de concursos de belleza, nunca había visto el Miss Mundo o el Miss Universo. Sin embargo, es un orgullo estar aquí con la bandera de México representando a todo mi país. He venido a hacerme con el primer puesto. Quiero mostrar al mundo lo que la mujer mexicana puede hacer”, dijo Álvarez.
En un lujoso hotel a orillas del río Támesis, con el muy característico Big Ben de fondo, atendieron a la prensa las 124 candidatas, que sueñan con suceder a la filipina Megan Young como Miss Mundo, en un certamen marcado por el asesinato hace pocos días de Miss Honduras 2014, María José Alvarado.
Pese al ambiente distendido y optimista en el que viven las contendientes en Londres durante los días previos a la gala final del certamen, que se celebrará el próximo 14 de diciembre, la ausencia de una de las participantes ha “marcado” a las candidatas, especialmente a las de Centroamérica y Sudamérica.
El grupo de participantes se reunió el pasado domingo en el centro de conferencias Gibson Hall, en Londres, en un servicio religioso especial en el que se recordó a Alvarado y a su hermana, desaparecidas el 13 de noviembre y que fueron encontradas muertas seis días después en un departamento de Santa Bárbara.
“Su fallecimiento es algo que nos ha dolido a todas. Era una adolescente que quería cumplir su sueño. Nosotras estamos disfrutando esta experiencia y ella no pudo, y es algo que nos duele mucho y que no es justo para Miss Honduras”, dijo, entre lágrimas, la colombiana Leandra García.
“Para mí fue algo muy doloroso. La conocí tres meses antes de venir a Londres, en una actividad que tuvimos juntas en Belize. Miraba las noticias y no lo podía creer”, dijo por su parte Keyla Bermúdez, representante de Guatemala, de 22 años.
“Aunque no llegó a Londres, todas la sentimos aquí. Era parte de la concentración y la vamos a llevar en el corazón”, indicó la representante española, Lourdes Rodríguez, de 20 años.
Como una forma de recuperar el ánimo, las participantes acudieron ayer a ver el célebre musical “El fantasma de la ópera” y hoy subrayaron sus “ganas de disfrutar” durante las tres semanas previas a la final, que tendrá lugar en el Centro de Exposiciones Excel de la capital británica.
La caleña García, de 22 años, llegó a Londres dispuesta a ser la primera participante colombiana en llevarse al país “cafetero” el título de Miss Mundo.
“Representar a Colombia en este certamen es un orgullo. Lo importante es dejar el nombre de tu país lo más alto posible. Pero solo el hecho de estar aquí es ya una recompensa”, comentó la joven, que trabaja como presentadora de televisión.
A la venezolana Débora Menicucci, por su parte, la acompaña la presión propia de este tipo de certámenes. En Venezuela, de hecho, se celebran infinidad de concursos de belleza y miles de niñas sueñan con llegar a ser un día reinas sobre la pasarela.
En Londres, esta modelo y diseñadora, de 1,80 metros de estatura, podría convertirse en la séptima mujer en llevar al país sudamericano el ansiado título, desde el nacimiento de Miss Mundo en 1951.
“Estar aquí lo es todo para mí -dijo Menicucci, de 23 años-. Quiero que el nombre de Venezuela llegue a lo más alto. Me gustaría disponer de ese poder que te da la corona y demostrar que mi país quiere hacer algo por la gente que sufre. He venido a Londres por la victoria”, afirmó.
Por su parte, Daniela Álvarez, mexicana de 20 años que aspira a ser presentadora de televisión, aseguró que ha ido a la capital británica a “mostrar al mundo de lo que es capaz la mujer mexicana”.
“No soy de concursos de belleza, nunca había visto el Miss Mundo o el Miss Universo. Sin embargo, es un orgullo estar aquí con la bandera de México representando a todo mi país. He venido a hacerme con el primer puesto. Quiero mostrar al mundo lo que la mujer mexicana puede hacer”, dijo Álvarez.