Christina Aguilera vuelve poco a poco a su ser. La cantante de origen latino por fin ha conseguido dar un frenazo a su imparable decadencia física y estilística de los últimos años, en los que no paraba de ganar peso hasta quedar prácticamente irreconocible y lucía un look cada vez más estrafalario, con sus mechas de colores imposibles y sus recargados complementos.
Pero esto parece haber quedado atrás, la cantante ha aparecido en la presentación de la cuarta temporada de la edición estadounidense de La Voz mucho más delgada que en los meses recientes. Además Christina ha abandonado las mechas rosas para volver al rubio con el que se dio a conocer y el resultado es un aspecto mucho más elegante y sexy.
Christina, de 32 años, estrenaba su nuevo tipo con un minivestido blanco y negro y un ancho cinturón negro y dorado que resaltaba sus curvas. Y eso, sí, como siempre con unos zapatos de tacón de aguja y plataforma, indispensables para conseguir destacar pese a su escaso 1,56 de estatura. Aún le queda mucho para tener el tipín que exhibía cuando se dio a conocer en el mundo de la música y quizá nunca vuelva a tenerlo. Pero sin duda está en la dirección correcta.
